domingo, 26 de abril de 2020

Cuadragésimo tercer día de cuarentena. Infantes


Cuadragésimo tercer día de cuarentena. Infantes. Niños y niñas, sois la leche. Los adultos por esta manía que tenemos de idiotización de la infancia, nos pensamos que sois lelos incapaces de comprender todo aquello que se sale de los parámetros que nosotros, los mayores, hemos decidido que debe moverse vuestro mundo. Flaco favor os hacemos con tanta protección a cambio de convertiros en pequeños Teletubbies, aunque estéis en quinto de primaria.
Nos habéis dado una lección, porque con el confinamiento del coronavirus habéis demostrado que sois más diciplinados que nosotros, que entendéis la situación mucho mejor que los mayores y que, además, tenéis un grado de madurez, que para vuestra edad debe ser la apropiada, a pesar de que los adultos no nos demos cuenta. ¿Sabéis por qué? Por que todos nosotros hemos perdido la memoria emocional de cuando éramos pequeños, y somos incapaces de empatizar con vuestros sentimientos y vuestra manera de ver las cosas.
Pensábamos, porque los mayores somos como el maestro Ciruela, que no sabía leer y montó una escuela, que ibais a convertiros en pequeños monstruos insoportables conforme pasaban los días de confinamiento, y nos habéis demostrado, con vuestra capacidad de adaptación a la situación, que no es así. Además, como decía una niña, ahora todos los días son fin de semana, porque podemos estar con nuestros padres y desayunar como si fuera sábado. Esta es otra cosa que los mayores hemos descuidado hacia vosotros: vivimos tan ocupados con nuestra vida de prisas y ocupaciones varias, que no nos paramos a pensar si os estamos haciendo felices, con tanta ausencia y cansancio al llegar a casa.   
La otra lección, nos la habéis dado hoy, primer día de salida, para vosotros, del confinamiento. Otra vez nos ha salido el maestro Ciruela de dentro, y no hemos parado de pontificar, yo el primero, que la salida a la calle, tal como se ha autorizado, iba a ser un caos de niños y niñas queriendo ir al parque a jugar como antes. Y nos hemos vuelto a equivocar con vosotros. Yo que tengo un perrillo, esta mañana cuando lo he sacado a pasear, os he visto disciplinados, con la lección bien aprendida; corriendo, saltando,  en vuestros patinetes, bicicletas, motos sin pedales, carritos de muñeca… todo sin una queja, contentos y dando alegría a unas calles que ya estaban pareciendo demasiado aburridas.
Aunque no lo sepáis nos estáis haciendo un favor, porque gracias a vosotros los papis y mamis podemos salir a la calle también. Y sin no vivís muy lejos de los abuelos, les haréis muy felices yendo a verles al balcón de su casa.
Me gustaría, que después de esta pandemia que nos está enseñando tantas cosas, empezáramos a trataros como personas, pequeñas, pero personas que pensáis, tenéis opinión y capacidad de respuesta ante todo cuando se os explican las cosas. Querer mucho a vuestros padres y madres, respetarlos, pero también hacerles ver, que sois más listos de lo que creen.
Nos vemos a las ocho aplaudiendo por la sanidad y por vosotros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bullying político

  Pasados ya los días de tensión nacional e internacional y de incertidumbre expectante que hemos tenido en España y quizá en parte del mund...