martes, 19 de noviembre de 2013

A ti Mateo, es a ti.


Escrito por González de la Cuesta

                 Escribir una novela sobre pinturas robadas, con Roma como escenario y la Iglesia como tenedor de arte, es un riesgo hoy en día, pues se puede caer en esa corriente de misterios vaticanistas y sectas de origen oscuro que tratan de preservar la verdad del universo, que tan al uso están en la literatura desde hace años, y que, todo hay que decirlo, ha dado algunas obras esplendidas y muchas más prescindibles. Por eso a Juanma Velasco (Castellón, 1963) autor de la novela “Sólo los hombres sin patria pintan lobos”, hay que reconocerle que haya sabido dar el tono adecuado a su nueva novela A ti Mateo, es a ti, sin dejarse llevar por ese torrente editorial que ha colonizado los estantes de las librerías en los últimos años.
                A ti Mateo, es a ti, es una novela muy bien trazada, que nos habla de la ambición del poder, la glotonería de la riqueza y el triunfo del amor, con un cuadro de Caravaggio, La vocación de San Mateo, exhibido en la iglesia de San Luis de los Franceses en Roma, que sin pretenderlo se convierte en el verdadero personaje principal de la trama, haciendo girar al resto alrededor de él. Una historia contada con maestría que tiene un argumento muy bien estructurado de intriga policiaca, pero que no se resuelve dentro de los cánones habituales de este género. Porque aunque la sucesión de capítulos platean una trama policial, salpicada de retrospectivas históricas que nos cuentan cómo se gestó la pintura del cuadro, el fondo de la historia tiene más que ver con la realidad de la vida, cargada de matices, en donde los personajes no aparecen como buenos o malos, sino simplemente como deudores de sus propios actos.
                Hay varias intrigas en la novela que se superponen con la habilidad suficiente para que no se entorpezcan unas a otras, y para que las resoluciones de todas lleven una secuencia que nos haga ver que el final de la historia es la suma de todas ellas. Pero también hay una pulsión de deseo sexual que atraviesa gran parte de la narración, convirtiéndola, en algunos momentos, casi en una novela erótica.
                Por todo ello, Juan Velasco ha acertado en esta su segunda novela, haciendo de A ti Mateo, es a ti, una lectura recomendable, en la que podremos disfrutar y darnos cuenta que detrás de cada cosa, siempre hay una trastienda en la que se esconde otra realidad menos visible.

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